Las noticias falsas o “Fake news” se han convertido en las verdaderas protagonistas de nuestra sociedad, pero siendo las villanas de la historia.
El escritor del libro “Fake News”, Marc Amorós, las definió como “informaciones falsas diseñadas para hacerse pasar por noticias con el objetivo de difundir un engaño o una desinformación delibrada para obtener un fin político o financiero”. Además, gracias a las redes sociales, estas se difunden a una velocidad más elevada si cabe y llegan a un mayor número de personas.
En Chile, este fenómeno se ve desde hace varios años, sobre todo en política, aunque no tenemos datos concretos recientes. Para el 2018, en un estudio realizado por académicos de la Universidad Católica, más del 75% de los encuestados informaron estar al tanto de al menos cuatro afirmaciones que eran falsas, especialmente las relacionadas con rumores en torno a los grandes incendios forestales de 2017 y a los mitos científicos relacionados con las vacunas. Sin embargo, el estudio señala que, en el mediano y largo plazo, las noticias falsas tienen un efecto súper corrosivo, porque en la medida en que una persona cree que son verdad, se empieza a perder confianza en el sistema político completo.
Hoy, cuando el afán por la exclusividad y la inmediatez son las principales directrices de consumo en términos de noticias, podemos caer en información o noticias que no siempre son ciertas. Este fenómeno global afecta la comunicación en todos sus niveles y plataformas, incluyendo las que se desarrollan en las empresas, tanto para sus públicos internos como externos.
No obstante, en este plano, pueden ser combatidas para garantizar buenas campañas de comunicación basadas en la trasparencia y honestidad, atributos claves para cualquier marca.
Algunas acciones que podemos llevar a cabo
Las empresas son y deben hacerse responsables de gestionar la comunicación de buena manera para que las noticias falsas no sean las protagonistas de nuestras estrategias comunicacionales
La confianza es una de las principales herramientas que destruye las fake news. Para esto, la empresa debe basar su visión, misión y valores en la transparencia y honestidad, y darlas a conocer en todas las instancias y acciones que sean posibles. De esta manera, podrá conseguir seguidores o clientes mucho más comprometidos con la marca, ya que este compromiso va íntegramente ligado a la confianza. Con clientes o proveedores comprometidos, es más difícil que una mentira o rumor de algo que la compañía hizo o dijo sea considerado como real por ellos.
Otro de los instrumentos importantes son los verificadores. Existen algunas plataformas en Internet que se dedican a desmontar las noticias que son falsas que pueden llegar a dañar la imagen de una persona o empresa. Además, alguna de ellas imparte pequeños talleres sobre cómo detectar cuando estamos frente a una noticia falsa: buscar las fuentes, comprobar los enlaces y los datos.
Además, es crucial vigilar y verificar las fuentes oficiales. En este punto, la gestión de prensa y redes sociales de cada compañía es crucial, ya que serán ellas las que entreguen las noticias relacionadas a la empresa, sus productos/servicios y contingencias. En el caso de las redes sociales, la empresa debe tener especial cuidado sobre qué cosas se comparten o se marcan como “me gusta”.
Insistimos en que las notas de prensa siempre son una buena herramienta para informar para cualquier empresa, ya que le comunican directamente a medios y su público respecto a algún acontecimiento, aportando datos claros y dando las noticias precisas y deseadas por parte de la misma. Con esto se consigue afianzar los compromisos de los lectores, de los trabajadores y de la imagen de la empresa de cara a la sociedad. Por lo tanto, si se combina la buena gestión de redes sociales y la apuesta por las notas de prensa, difícilmente esta compañía será víctima de la desinformación.
A modo de resumen, las fake news pueden resultar un verdadero dolor de cabeza para las estrategias de comunicación de cualquier compañía y pueden desencadenar una crisis de proporciones. Si se hace una buena gestión de las redes sociales y se difunden notas de prensa, se conseguirá tener un público (y clientes) con un compromiso basado en la confianza hacía nuestra organización. Eso permitirá que podamos llevar a cabo una gestión de la comunicación mucho más eficaz evitando caer en las tendencias de la sociedad de la desinformación en la que nos vemos inmersos.
Fuente: Equipo GreenCom
